viernes, 31 de enero de 2014

Riesgos de El ácido bórico

El ácido bórico es el más común de los boratos, que son compuestos formados por boro, oxígeno y otros elementos. La exposición aguda al ácido bórico en forma líquida o sólida produce irritación, cuya gravedad dependerá de la concentración y la duración de la exposición. La inhalación de polvos o nieblas de boratos puede irritar directamente la piel, los ojos y el sistema respiratorio.
Los síntomas de esta irritación consisten en molestias oculares, sequedad de boca, dolor de garganta y tos productiva. Los traba- jadores habitualmente presentan estos síntomas después de una exposición aguda a concentraciones superiores a 10 mg/m3 de ácido bórico. No obstante, la exposición crónica a menos de la mitad de esta concentración también puede producir síntomas de irritación.
Los trabajadores expuestos al polvo de bórax (borato sódico) presentan tos productiva crónica y, en los casos de exposición prolongada, se han detectado anomalías obstructivas, aunque no está claro que estén relacionadas con la exposición.
Los boratos se absorben rápidamente a través de las heridas abiertas en la piel y por vía respiratoria y digestivo. Después de absorberse, actúan principalmente sobre la piel, el sistema nervioso central y el tracto digestivo. Los síntomas suelen aparecer en poco tiempo, aunque en el caso de la exposición cutánea pueden tardar horas en manifestarse. Tras la absorción, la piel o las mucosas pueden presentar un enrojecimiento anormal (eritema) o un desprendimiento del tejido superficial. La exposición crónica se ha asociado a eczema, caída del cabello en parches e hinchazón alrededor de los ojos. Estos efectos dermato- lógicos pueden tardar varios días en presentarse después de la exposición. La persona experimenta dolor abdominal, náuseas, vómitos y diarrea. Los vómitos y la diarrea pueden tener una coloración azul-verdosa y contener sangre. También pueden presentarse cefaleas, excitación o depresión, convulsiones, letargo
y coma.
En los casos de intoxicación aguda, se ha observado anemia, acidosis y deshidratación, acompañados por una disminución rápida del pulso y la presión sanguínea. Estos efectos pueden ir seguidos por un ritmo cardíaco irregular, shock, insuficiencia renal y, en casos raros, lesiones hepáticas. Las víctimas aparecen pálidas, sudorosas y muy enfermas. La mayoría de estos síntomas graves se presentan justo antes de la muerte por intoxicación aguda con boratos. Sin embargo, cuando las víctimas reciben un diagnóstico y un tratamiento rápidos, los efectos son general- mente reversibles.
Los efectos de los boratos sobre la reproducción no se conocen claramente. La exposición al ácido bórico inhibe la movilidad espermática en las ratas y, a concentraciones altas, produce atrofia testicular. Los estudios de genotoxicidad en animales y tejidos han dado resultados negativos, pero se ha demostrado infertilidad en machos y hembras tras la exposición crónica a ácido bórico en los alimentos. Las crías muestran un desarrollo tardío y anormal, con un crecimiento anormal de las costillas. En cuanto al hombre, sólo existen indicios de una disminución de la fertilidad en los pocos trabajadores que han sido evaluados en estudios no controlados.

jueves, 30 de enero de 2014

Compuestos de Boro Riesgos para la salud

El boro es una sustancia presente en la naturaleza que se encuentra con frecuencia en los alimentos y el agua potable. En cantidades traza, es esencial para el crecimiento de las plantas y ciertos tipos de algas. A pesar de que también se encuentra en los tejidos humanos, su función se desconoce. El boro se considera generalmente una sustancia segura para utilizarse como aditivo indirecto en los alimentos (por ejemplo, durante el envasado), pero los compuestos que contienen boro pueden ser muy tóxicos. El boro está presente en una serie de compuestos útiles desde el punto de vista industrial, como los boratos, los boranos y los haluros de boro.
En el hombre, la toxicidad del boro se manifiesta principalmente tras el uso crónico de medicamentos que contienen ácido bórico y en casos de ingestión accidental, especialmente en niños de corta edad. La toxicidad de origen profesional se deriva gene- ralmente de la exposición del aparato respiratorio o de heridas abiertas a polvos, gases o vapores de los compuestos de boro.
El contacto con casi todos estos materiales en concentraciones habituales puede producir irritación aguda de los ojos, la piel y el tracto respiratorio. La absorción afecta a la sangre, el tracto respiratorio y digestivo, los riñones, el hígado y el sistema nervioso central y, en casos extremos, puede originar la muerte.

miércoles, 29 de enero de 2014

Usos COMPUESTOS DE BORO

El boro y sus sales tienen diversos usos en las industria electró- nica, metalúrgica, química, cerámica, textil y papelera, así como en construcción. En la industria electrónica, el boro, el tribromuro de boro y el tricloruro de boro se utilizan como semiconductores. El boro sirve como ignitor en los tubos de radio y como agente desgasifi- cador en metalurgia. También se utiliza en pirotecnia. El diborano, el pentaborano y el decaborano se utilizan en combustibles de alta energía. El tricloruro de boro, el diborano y el decabo- rano se emplean como propulsores de cohetes y el trietilboro y el boro, como ignitores para motores de cohetes y aviones de propulsión a chorro. El 10boro se emplea en la industria nuclear
como componente del blindaje contra neutrones en los reactores. En la industria metalúrgica, muchos de los boranos se utilizan en procesos de soldadura y bronceado. Otros compuestos se emplean como retardadores de llama y como decolorantes en la industria textil, papelera y de pinturas y barnices. El óxido de boro es un aditivo antiinflamable en pinturas y barnices y el tetraborato sódico, el bórax y el trimetil borato se emplean para el tratamiento ignífugo de tejidos. Tanto el bórax como el tetraborato sódico se utilizan para el tratamiento ignífugo y el envejecimiento artificial de la madera. En el sector de la construcción, son componentes de los aislantes de fibra de vidrio. El tetraborato sódico se utiliza también como algicida en aguas industriales y como agente en el curtido y la conservación de pieles. El bórax se emplea como germicida en productos de limpieza, como inhibidor de la corro- sión en anticongelantes y como insecticida en polvo para el trata- miento de las grietas en las zonas donde se manipulan alimentos. El decaborano se utiliza para quitar el brillo al rayón y como agente antipolilla en la industria textil. El borohidruro sódico es un agente blanqueador para la pasta papelera.
En la industria cerámica, el óxido bórico y el bórax forman parte de los vidriados y el tetraborato sódico es un componente de los esmaltes y vidriados de la porcelana. El perborato sódico se utiliza para blanquear tejidos y en galvanoplastia. También se emplea en jabones, desodorantes, detergentes, colutorios bucales y en los colorantes para el teñido en cubas. El trifluoruro de boro se emplea en el envasado de alimentos, en electrónica y en los reac- tores nucleares que producen material fisionable

martes, 28 de enero de 2014

Usos de la Azida sódica y ácido hidrazoico

La azida sódica se obtiene combinando sodamida con óxido nitroso. Reacciona con el agua produciendo ácido hidrazoico, por lo que pueden existir vapores de ácido hidrazoico cuando se manipula la azida sódica. A escala comercial, el ácido hidrazoico se obtiene mediante reacción de un ácido con azida sódica.
La toxicidad aguda de la azida sódica parece ser ligeramente menor que la del cianuro sódico. La absorción por vía respiratoria, digestiva o percutánea puede causar la muerte. El contacto con esta sustancia produce quemaduras en la piel y los ojos. Un técnico de laboratorio ingirió accidentalmente lo que se consideró una “cantidad muy pequeña” de azida sódica y presentó síntomas de taquicardia, hiperventilación e hipotensión. Parece ser que la dosis hipotensora mínima en el hombre oscila entre 0,2 y 0,4 mg/kg.
El tratamiento de personas normales con 3,9 mg/día de azida sódica durante 10 días sólo produjo una sensación de latidos muy fuertes del corazón. Algunos pacientes hipertensos desarrollaron sensibilidad a la azida con 0,65 mg/día.
Los trabajadores expuestos a 0,5 ppm de ácido hidrazoico presentaron cefalea y congestión nasal. Tras la exposición a 3 ppm durante menos de 1 hora se describió, además, debilidad e irritación ocular y nasal. El pulso fue variable y la presión sanguínea, baja o normal. En trabajadores que fabricaban azida de plomo se describieron síntomas similares y una clara hipoten- sión, sobre todo durante la jornada laboral, que remitía al aban- donar el lugar de trabajo.
Los estudios en animales han mostrado una disminución rápida y temporal de la tensión arterial con la administración de dosis orales únicas de 2 mg/kg o más de azida sódica. Con la administración por vía intravenosa de 1 mg/kg en gatos, se observó hematuria e irregularidades cardíacas. Los síntomas observados en animales tras la administración de dosis

relativamente altas de azida sódica fueron estimulación respira- toria y convulsiones, seguidas por depresión y muerte. La DL50 de la azida sódica es de 45 mg/kg en ratas y de 23 mg/kg en ratones.
La exposición a los vapores de ácido hidrazoico en roedores produce inflamación aguda del pulmón. Los vapores de ácido hidrazoico son unas ocho veces menos tóxicos que el cianuro de hidrógeno, y una concentración de 1.024 ppm produce la muerte de los ratones en 60 minutos (frente a 135 ppm en el caso del cianuro de hidrógeno).
La azida sódica es mutagénica en bacterias, aunque este efecto se reduce en presencia de enzimas metabólicas. También ha exhibido efectos mutagénicos en los estudios realizados con células de mamíferos.

lunes, 27 de enero de 2014

Usos Fenilhidracina

La patología debida a la fenilhidracina se ha estudiado por medio de experimentos con animales y observaciones clínicas. La infor- mación sobre los efectos de la fenilhidracina en el hombre se ha obtenido a partir del uso del clorhidrato de fenilhidracina con fines terapeúticos. Los efectos observados fueron anemia hemolí- tica, con hiperbilirrubinemia y urobilinuria, aparición de cuerpos de Heinz, lesiones hepáticas con hepatomegalia, ictericia y orina muy oscura por contener fenoles y también, en ocasiones, mani- festaciones renales. Los efectos hematológicos fueron cianosis, anemia hemolítica con metahemoglobinemia y leucocitosis. Los síntomas generales más frecuentes fueron fatiga, vahídos, diarrea y disminución de la presión sanguínea. En un estudiante que recibió
300 g de esta sustancia en el abdomen y los muslos, se observó colapso cardíaco y coma durante varias horas. Las personas con deficiencia hereditaria de glucosa-6-fosfato deshidrogenasa (G6PDH) son mucho más sensibles a los efectos hemolíticos de la fenilhidracina y deben evitar la exposición a esta sustancia.
En lo que se refiere a las lesiones cutáneas, se ha descrito eczema agudo con erupción vesicular y eczema crónico en las manos y los antebrazos de los trabajadores que fabrican antipi- rina. También se describió un caso de dermatosis vesicular con producción de flictenas en las muñecas de un auxiliar químico. La dermatosis apareció 5 ó 6 horas después de manipular el producto y tardó 2 semanas en curarse. Un ingeniero químico que manipuló esta sustancia presentó únicamente algunas pequeñas pústulas, que desaparecieron en 2 ó 3 días. Por tanto, se considera que la fenilhidracina es un potente sensibilizante cutáneo. Se absorbe muy rápidamente a través de la piel.
A la vista de los informes publicados sobre los efectos carcino- génicos de la fenilhidracina en ratones, el National Institute of Occupational Safety and Health (NIOSH) ha recomendado que se regule como un carcinógeno humano. Varios estudios en bacterias y cultivos tisulares han demostrado que es mutagénica. La inyección intraperitoneal en hembras preñadas de ratón provocó ictericia grave, anemia y deficiencias en la conducta adquirida en las crías.

domingo, 26 de enero de 2014

Usos Hidracina y sus derivados

La posibilidad de inflamación, explosión y toxicidad son los prin- cipales riesgos de las hidracinas. Por ejemplo, cuando la hidra- cina se mezcla con nitrometano, se forma un potente explosivo que es más peligroso que el TNT. Todas las hidracinas que se mencionan aquí tienen una presión de vapor suficientemente alta como para representar un riesgo grave para la salud por inhala- ción. Estos compuestos tienen un olor amoniacal, similar al del pescado, que resulta repulsivo e indica la presencia de concentraciones peligrosas en los casos de exposición accidental breve. A bajas concentraciones, como las que pueden producirse durante los procesos de producción o transporte, el olor puede no ser sufi- ciente para impedir la exposición profesional crónica a concen- traciones bajas en las personas que manipulan combustibles.
Las concentraciones moderadas o altas de vapores de hidracina son muy irritantes para los ojos, la nariz y el aparato respira- torio. Con las hidracinas utilizadas como propelentes, la irritación de la piel es importante y el contacto directo con el líquido produce quemaduras e incluso un tipo de dermatitis por sensibilización, sobre todo en el caso de la fenilhidracina. Las salpicaduras en los ojos producen una intensa irritación y la hidracina puede causar lesiones permanentes en la córnea.
Además de sus propiedades irritantes, las hidracinas también producen efectos sistémicos pronunciados sea cual sea la vía de absorción. Después de la inhalación, la absorción a través de la piel es la vía de intoxicación más importante. Todas las hidra- cinas son de moderadas a muy tóxicas para el sistema nervioso central y producen temblores, aumento de la excitabilidad del sistema nervioso central y, en dosis suficientemente altas, convul- siones. Estos síntomas pueden progresar hasta producir depre- sión, parada respiratoria y muerte. Otros efectos sistémicos producidos por las hidracinas son las alteraciones del sistema hematopoyético, el hígado y los riñones. Cada hidracina varía considerablemene en su grado de toxicidad sistémica, así como con respecto a los órganos afectados por ellas.
Los efectos hematológicos se explican por sí mismos sobre la base de una actividad hemolítica. Estos efectos dependen de la dosis y, con la única excepción de la monometilhidracina, son los más llamativos en los casos de intoxicación crónica. Con la fenilhidracina se producen alteraciones hiperplásicas de la médula ósea y también se ha observado hematopoyesis extramedular. La monometilhidracina es un potente formador de metahemoglobina y se eliminan pigmentos sanguíneos en la orina. Las alteraciones hepáticas son principalmente del tipo de degeneración grasa, que rara vez progresa a necrosis y, general- mente, son reversibles cuando se trata de las hidracinas de los propelentes. La monometilhidracina y la fenilhidracina, en dosis elevadas, pueden causar graves lesiones renales. Las lesiones del músculo cardíaco son principalmente de carácter graso. Las náuseas observadas con todas estas hidracinas son de origen central y refractarias a todo tipo de tratamiento. Los convulsivos más potentes de esta serie son la monometilhidracina y la 1,1-di- metilhidracina. La hidracina produce principalmente depresión y, con mucha menor frecuencia, convulsiones.
Todas las hidracinas parecen ejercer algún tipo de efecto oncogénico en una u otra especie de animales de laboratorio y por una u otra vía de entrada (administración con el agua de beber,

sonda gástrica o inhalación). La IARC las clasifica en el Grupo
2B, como posibles carcinógenos humanos. En los animales de laboratorio, con la excepción de un derivado que no se trata aquí, la 1,2-dimetilhidracina (o dimetilhidracina simétrica), existe una clara relación dosis-respuesta. La clasificación de estas sustancias en el grupo 2B obliga a reducir al mínimo cualquier exposición humana mediante el uso de equipos protectores aducados y la descontaminación de derrames accidentales.

sábado, 25 de enero de 2014

Riesgos del El diazometano

El diazometano es un insecticida eficaz para el control químico de las plagas por Triatoma. También resulta útil como algicida. Cuando el componente ictiotóxico de las algas verdes Chaeto- morpha minima se metila con diazometano, se obtiene un sólido que conserva su toxicidad letal para los peces. Resulta significa- tivo que en el metabolismo de los cancerígenos dimetilnitrosa- mina y circasina, uno de los productos intermedios sea el diazometano.

viernes, 24 de enero de 2014

Diazometano - Toxicidad.

La toxicidad del diazometano se ha atribuido a la formación intracelular de formaldehído. El diazometano reac- ciona lentamente con el agua formando alcohol metílico y libe- rando nitrógeno. El formaldehído, en cambio, se forma por oxidación del alcohol metílico. Hay que tener en cuenta la posibi- lidad de liberación in vivo de alcohol metílico o de reacción del diazometano con compuestos carboxílicos para formar ésteres metílicos tóxicos; por otra parte, los efectos nocivos del diazome- tano pueden deberse principalmente a la fuerte acción irritante de este gas sobre el aparato respiratorio.
Se ha demostrado que el diazometano es un carcinógeno pulmonar en ratones y ratas. También se ha demostrado que la aplicación en la piel y la inyección subcutánea, así como la inha- lación de este compuesto, favorecen el desarrollo de tumores en animales de experimentación. Los estudios en bacterias han demostrado efectos mutagénicos. No obstante, la Agencia Inter- nacional para la Investigación sobre el Cáncer (IARC) lo ha colocado en el Grupo 3, es decir, inclasificable como carcinógeno humano.

jueves, 23 de enero de 2014

Diazometano - Riesgos para la salud.

Este compuesto fue descrito por primera vez en el año 1894 por Von Pechmann, quien indicó que era sumamente tóxico y que causaba axfisia y dolor torácico. Poste- riormente, otros investigadores observaron síntomas de mareo y zumbidos. Se vio que la exposición cutánea al diazometano producía descamación de la piel y las mucosas y que su efecto era similar al del sulfatodimetilo. También se observó que los vapores de la solución del gas en éter eran irritantes para la piel y dejaban los dedos tan sensibles que era difícil hasta agarrar un alfiler. En
1930, la exposición de dos personas provocó dolor torácico, fiebre y síntomas asmáticos graves aproximadamente 5 horas después de la exposición a sólo trazas de este gas.
Es posible que la primera exposición al gas no produzca reac- ciones iniciales importantes. No obstante, las siguientes exposiciones, incluso a cantidades mínimas, pueden producir crisis asmáticas sumamente graves y otros síntomas. Los síntomas pulmonares se explicarían bien como resultado de una sensibi- lidad alérgica real tras la exposición reiterada al gas, especial- mente en las personas con alergia hereditaria o bien como consecuencia de una potente acción irritante del gas sobre las mucosas.
Se han descrito al menos 16 casos de intoxicación aguda por diazometano, incluidas muertes por edema pulmonar, en químicos y trabajadores de laboratorio. En todos los casos, los síntomas de la intoxicación fueron tos irritativa, fiebre y malestar de intensidad variable dependiendo del grado y la duración de la exposición. En algunos casos, las exposiciones posteriores provo- caron una reacción de hipersensibilidad.
En animales, la exposición a 175 ppm de diazometano durante
10 minutos produjo enfisema hemorrágico y edema pulmonar en gatos, provocando la muerte en 3 días.

miércoles, 22 de enero de 2014

Riesgos Diazometano

Riesgo de incendio y explosión. En estado líquido o gaseoso, el diazo- metano explota con llamarada y el líquido puede detonar incluso a -80 °C. Sin embargo, estas explosiones no se producen cuando el diazometano se prepara y se conserva en disolventes como el éter etílico.

martes, 21 de enero de 2014

Usos Otras azidas, como la metilhidracina, el hidrazobenceno, la 1,1-dime- tilhidracina, el sulfato de hidracina y el diazometano,

Otras azidas, como la metilhidracina, el hidrazobenceno, la 1,1-dime- tilhidracina, el sulfato de hidracina y el diazometano, se utilizan en numerosas industrias. La metilhidracina es un disolvente, un producto químico intermedio y un propelente de misiles, mien- tras que el hidrazobenceno es un producto químico intermedio y un aditivo para evitar la formación de sedimentos en los aceites para motores. La 1,1-dimetilhidracina se utiliza en las formulaciones de combustibles para cohetes. Es un estabilizante de los peróxidos orgánicos añadidos a los combustibles, un absorbente de gases ácidos y un componente de los combustibles de aviones de reacción. El sulfato de hidracina se utiliza para el cálculo gravimétrico de níquel, cobalto y cadmio como oxidante en los fundentes para soldar metales ligeros, como germicida y como agente reductor en el análisis de minerales y escorias.

lunes, 20 de enero de 2014

Usos La azida sódica

La azida sódica se utiliza en la síntesis orgánica, en la fabrica- ción de explosivos y como propelente en los airbags de los auto- móviles. El ácido hidrazoico se emplea para fabricar explosivos de contacto, como la azida de plomo.

domingo, 19 de enero de 2014

Usos La fenilhidracina, el aminoazotolueno y la hidracina

La fenilhidracina, el aminoazotolueno y la hidracina se utilizan en la industria de los colorantes. La fenilhidracina se utiliza también en la preparación de productos farmacéuticos. La hidracina es un reactivo utilizado en las células de combustible para uso militar y un agente reductor en la extracción del plutonio de los residuos de los reactores. Se utiliza en procesos de niquelado, tratamiento de aguas residuales, galvanoplastia de metales sobre vidrio y plásticos, reciclaje de combustibles nucleares y como componente de combustibles de alta energía. Es un inhibidor de la corrosión en el agua de las calderas y el agua de refrigeración de los reactores. También es un producto químico intermedio y un propelente de cohetes. El diazometano es un potente agente metilante para los compuestos ácidos, como los ácidos carboxílicos y los fenoles.

sábado, 18 de enero de 2014

Usos El ácido edético (EDTA)

El ácido edético (EDTA) tiene un gran número de funciones en las industrias alimentaria, química, textil, metalúrgica, fotográfica y sanitaria. Es un antioxidante que se añade a los alimentos. El EDTA se utiliza como agente quelante para eliminar los iones metálicos no deseados en el agua de las calderas y de refrigera- ción y en los procesos de niquelado y de obtención de pulpa de papel. También se emplea como decolorante en el procesado de películas en la industria fotográfica, como mordiente para los acabados metálicos y como agente de tinción en la industria textil. El EDTA se encuentra en detergentes para ropa, germi- cidas industriales, fluidos de corte, en la producción de semicon- ductores, jabones líquidos, champús, productos farmacéuticos y cosméticos. También se emplea en medicina para tratar la intoxi- cación por plomo.

viernes, 17 de enero de 2014

Usos de La 1,1’-azobis(formamida)

La 1,1’-azobis(formamida) es un agente de soplado para el caucho sintético y natural y para los polímeros de acetato de etilen vinilo. También es útil como agente espumante y como aditivo para aumentar la porosidad de los plásticos. El ácido tricloro isocianúrico y el dicloroisocianurato sódico se utilizan como agentes desinfectantes para piscinas y como principios activos de detergentes, lejías de uso comercial y doméstico y compuestos para lavavajillas. El dicloroisocianurato sódico se utiliza también para
el tratamiento del agua y de las aguas residuales.

jueves, 16 de enero de 2014

Usos AZIDAS

Las azidas tienen diversos usos en las industrias de productos químicos, colorantes, plásticos, caucho y metales. Varios de estos compuestos se utilizan para el tratamiento de aguas residuales y como productos químicos intermedios, aditivos alimentarios y agentes desinfectantes en detergentes para lavavajillas y piscinas

martes, 14 de enero de 2014

Medidas de salud y seguridad Aminas Aromaticas

La principal medida para prevenir los derrames o la contaminación del ambiente de trabajo con estos compuestos es el diseño adecuado de las plantas. El sistema de ventilación para controlar el contaminante debe diseñarse de tal forma que quede lo más cerca posible de la fuente contaminante. Los trabajadores deberán cambiarse la ropa de trabajo a diario y existirán las instalaciones adecuadas para una ducha obligatoria al final de la jornada de trabajo. La piel o las ropas contaminadas se lavarán inmediatamente y las personas expuestas se mantendrán bajo supervisión médica. Tanto los trabajadores como los supervisores deberán conocer la naturaleza y el grado de riesgo al que están expuestos y sabrán cómo realizar su trabajo de manera limpia y segura. Las labores de mantenimiento deberán realizarse siempre eliminando previamente todas las posibles fuentes de contacto con las sustancias químicas peligrosas.








lunes, 13 de enero de 2014

Riesgos Colorantes azoicos

En general, los colorantes azoicos, como tal grupo, representan un riesgo bajo de toxicidad. Muchos de ellos tienen una DL50 por vía oral superior a 1 g/kg en ratas y ratones y los roedores pueden consumir durante toda su vida dietas de laboratorio con más de 1 g del compuesto por kg de alimento. Algunos pueden causar dermatitis de contacto pero, en general, con escasas manifestaciones. En la práctica resulta bastante difícil determinar si las lesiones cutáneas se deben al propio colorante o a otros productos que coexisten con él. Por el contrario, cada vez se presta más atención al potencial cancerígeno de los compuestos azoicos. A pesar de que aún existen pocas observaciones epidemiológicas que lo confirmen, los resultados obtenidos en estudios a largo plazo indican que algunos colorantes azoicos son cancerígenos para los animales de laboratorio. El principal órgano afectado en estas condiciones experimentales es el hígado, seguido por la vejiga urinaria. En algunos casos también se encuentra afectado
el intestino. Con todo, es muy difícil extrapolar estos resultados al hombre.
La mayoría de los colorantes azoicos carcinogénicos no lo son de forma directa, sino como precarcinógenos, debiendo transfor- marse mediante una activación metabólica in vivo, para pasar de precarcinógenos a carcinógenos finales. Por ejemplo, el metilami- noazobenceno experimenta primero una N-hidroxilación y una N-desmetilación en el grupo amino y después se conjuga el grupo sulfato con el derivado N-hidroxi para formar el carcinógeno final, que reacciona con los ácidos nucléicos.
Es importante señalar que los colorantes diazoicos derivados de la bencidina pueden transformarse en el potente carcinógeno bencidina a través de los procesos metabólicos normales del orga- nismo. El propio organismo o las bacterias del intestino reducenin vivo los dos grupos azo a bencidina. Por este motivo, los colo- rantes azoicos deben manipularse con prudencia.

domingo, 12 de enero de 2014

Riesgos Xilidinas.

Los resultados de los experimentos realizados con animales indican que se tratan, principalmente, de toxinas hepá- ticas que actúan de forma secundaria sobre la sangre. No obstante, en otros estudios se ha observado que inducen la forma- ción de metahemoglobina y cuerpos de Heinz en gatos, pero no así en conejos.

sábado, 11 de enero de 2014

Riesgos Toluendiaminas.

De los seis isómeros de la toluendiamina, el más frecuente es el 2,4-, que constituye el 80 % de los productos intermedios utilizados en la producción de diisotiocianato de tolueno, estando representado el otro 20 % por el isómero 2,6-, que es una de las sustancias básicas de los poliuretanos. Este producto es objeto de especial atención desde el descubrimiento de su potencial cancerígeno en los animales de experimentación. Sin embargo, no se dispone de datos humanos.

viernes, 10 de enero de 2014

Riesgos La toluidina

La toluidina se presenta en tres formas isoméricas, aunque sólo tienen importancia industrial los isómeros o-y p-. La o-toluidina y la p-toluidina se absorben con suma facilidad a través de la piel o por inhalación de polvos, humos o vapores. Estos compuestos son potentes formadores de metahemoglobina y la intoxicación aguda puede ir acompañada de hematuria microscópica o macroscópica, aunque son irritantes de la vejiga mucho menos potentes que la 5-cloro-o-toluidina. Existen pruebas suficientes de su efecto cancerígeno en animales como para clasificar a la o-toluidina y a la p-toluidina como posibles carcinógenos humanos.

jueves, 9 de enero de 2014

Riesgos Fenilendiaminas

Existen varias formas isoméricas de las fenilendiaminas, pero sólo los isómeros m- y p-tienen importancia industrial. A pesar de que la p-fenilendiamina puede actuar como formadora de metahemo- globina in vitro, no se ha dado ningún caso de metahemoglobi- nemia por exposición industrial. La p-fenilendiamina es un producto notorio por su acción sensibilizante de la piel y el aparato respiratorio. El contacto frecuente con la piel causa rápi- damente dermatitis de contacto. También se ha descrito acné y leucoderma. El antiguo problema de la “dermatitis de los pele- teros” es actualmente mucho menos frecuente gracias a las mejoras introducidas en los procesos de tintado, que permiten eliminar cualquier vestigio de p-fenilendiamina en los productos acabados. De forma análoga, el asma, que era un proceso frecuente entre los tintoreros de pieles que utilizaban esta sustancia, es actualmente relativamente rara gracias a las mejoras en el control del polvo ambiental. Incluso cuando se utilizan controles, resulta útil realizar una prueba cutánea preliminar antes de la posible exposición profesional. La m-fenilendiamina es un potente irritante de la piel, los ojos y el tracto respiratorio. Las conclusiones obtenidas de los experimentos realizados con las fenilendiaminas y sus derivados (como N-fenil o 4- ó 2-nitro) para determinar el potencial carcinogénico han sido, hasta el momento, insuficientes, dudosas o negativas. Los derivados clorados que se han investigado parece ser que tienen efectos cancerígenos en los animales de experimentación.
En el pasado, el potencial carcinogénico de las mezclas comerciales era un motivo de preocupación debido a la presencia de b-naftilamina como impureza en cantidades considerables (decenas o incluso centenas de ppm) en algunas de las primeras preparaciones y por el descubrimiento, en el caso concreto de la N-fenil-2-naftilamina, PBNA, de la excreción metabólica de b-naft- ilamina, aunque en cantidades infinitesimales. Los experimentos han sugerido un cierto potencial cancerígeno de esta sustancia en los animales de experimentación, pero todavía no han podido extraerse conclusiones definitivas ni se sabe la importancia de los hallazgos metabólicos. Los estudios epidemiológicos realizados sobre un gran número de personas que trabajaban en condi- ciones diferentes no han podido demostrar un aumento significa- tivo de la incidencia de cáncer en los trabajadores expuestos a estos compuestos. La cantidad de b-naftilamina presente actual- mente en los productos comerciales es muy pequeña (menos de
1 ppm y, con frecuencia, 0,5 ppm). En este momento no se puede extraer ninguna conclusión sobre el riesgo real de cáncer, motivo por el cual deben adoptarse todo tipo de precauciones, entre ellas la eliminación de las impurezas sospechosas y el uso de medidas técnicas protectoras en la fabricación y el uso de estos compuestos.

miércoles, 8 de enero de 2014

Riesgos Naftilaminas

Las naftilaminas pueden presentarse en dos formas isoméricas: a-naftilamina y b-naftilamina. La a-naftilamina se absorbe a través de la piel y por inhalación. En contacto con esta sustancia produce quemaduras en la piel y los ojos. No se conocen casos de intoxicación aguda como consecuencia de su uso en la industria, pero la exposición al producto de grado comercial produjo, en tiempos pasados, muchos casos de papilomas y carcinomas de vejiga. La posibilidad de que estos tumores pudieran atribuirse a la gran cantidad de impurezas que contenía la b-naftilamina originó una polémica que fue más allá de los círculos académicos, pues hizo que la a-naftilamina de hoy en día tenga una propor- ción mucho menor de b-naftilamina como impureza.
La b-naftilamina es un conocido carcinógeno de vejiga en el hombre. La intoxicación aguda produce metahemoglobinemia y cistitis hemorrágica aguda. Si bien hubo un tiempo en que esta sustancia se utilizaba mucho como producto intermedio en la fabricación de colorantes y antioxidantes, en la actualidad casi se ha abandonado tanto su producción como su uso por considerarse demasiado peligrosa su manipulación sin medidas preventivas que, por otra parte, eran prohibitivas. Esta sustancia se absorbe rápidamente por vía cutánea y respiratoria. La cuestión de sus efectos tóxicos agudos queda relegada a segundo término por su alto poder cancerígeno.


martes, 7 de enero de 2014

Riesgos Difenilamina.

Esta sustancia química es levemente irritante. En condiciones industriales normales no es peligrosa, pero el potente carcinógeno 4-aminodifenilo puede estar presente como impureza durante el proceso de fabricación. Este compuesto alcanza concentraciones considerables en los alquitranes producidos en la etapa de destilación y comporta un riesgo de cáncer de vejiga. A pesar de que los procedimientos modernos de fabricación han permitido reducir considerablemente la cantidad de impurezas de este compuesto en el producto comercial, se deben adoptar las precauciones adecuadas para evitar el contacto innecesario con él.

lunes, 6 de enero de 2014

Riesgos Dimetilaminoazobenceno.

El metabolismo del DAB ha sido objeto de numerosos estudios y se ha comprobado que sufre reducción y ruptura del grupo azoico, desmetilación, hidroxilación aromática, N-hidroxilación, N-acetilación, unión a proteínas y unión a ácidos nucléicos. El DAB exhibe propiedades mutagénicas después de su activación. Es carcinogénico por distintas vías en ratas y ratones (carcinoma hepático) y por vía oral produce carci- noma de vejiga en perros. La única observación relacionada con la salud de los trabajadores expuestos a esta sustancia se refiere a dermatitis de contacto por la manipulación de DAB.
Las medidas técnicas deben ir encaminadas a evitar todo contacto con la piel y las mucosas. Los trabajadores expuestos a DAB deben utilizar equipos de protección personal y realizar su trabajo exclusivamente en áreas restringidas. Las ropas y equipos utilizados deben colocarse en recipientes impermeables para su descontaminación o desecho. Los reconocimientos médicos previos al empleo y los exámenes periódicos deben centrarse en la función hepática. En Estados Unidos, la OSHA ha conside- rado que el DAB es un posible cancerígeno humano.

jueves, 2 de enero de 2014

Riesgos Diamino-4,4’-diaminodifenilmetano.

Diamino-4,4’-diaminodifenilmetano. La demostración más patente de la toxicidad de este compuesto fue cuando 84 personas sufrieron hepatitis tóxica como consecuencia de haber comido pan fabricado con harina contaminada con este producto. También se detectaron otros casos tras exposiciones de carácter profesional en las que se había producido una absorción percu- tánea del mismo. Este compuesto puede causar dermatitis alér- gica. Los experimentos en animales hacen sospechar que se trata de un posible carcinógeno, pero aún no se han obtenido resul- tados definitivos. Se ha demostrado que los derivados del diamino- difenilmetano son carcinógenos para los animales de laboratorio.

miércoles, 1 de enero de 2014

Riesgos La 3,3’-diclorobencidina

La 3,3’-diclorobencidina es un probable carcinógeno humano (Grupo 2B de la IARC). Esta conclusión se basa en el aumento estadísticamente significativo de la incidencia de tumores obser- vado en ratas, ratones y perros y en los datos positivos sobre su genotoxicidad. Su relación estructural con la bencidina, un carci- nógeno de la vejiga humana conocido y potente, aumenta la posi- bilidad de que sea también un carcinógeno humano.